Blanca Haddad, (Caracas, Venezuela. 1972) es una artista que se inserta en corrientes artísticas como la expresionista o neo figurativas, lo vemos en su destreza y la manera de producir sus obras, sin embargo su trabajo más que técnica se basa en sensaciones y reflexiones, y en los gestos que resultan como consecuencia de su particular forma de sentir y pensar el mundo. Sabe transmitirnos toda una carga espiritual a través de su obra. Su filosofía de vida gira en torno al valor de lo talismanes. Sin pretender ser maniquea, ella sabe que la gran potencia de su expresión proviene de lo “oscuro” y de ese crisol desde donde surgen los contenidos más intensos.
Sus lienzos y poemas generan un discurso evocador, nacido de una espiritualidad fantástica que nos invita a reflexionar sobre problemas sociales, religiosos, políticos, así como sobre las dificultades y desafíos que protagonizan los sectores marginados en los países latinoamericanos y del mundo, en general.
Despliega una cosmovisión muy particular al seguir los pasos transitados por los grandes maestros del expresionismo europeo. Se destaca también por su dedicación al arteterapia que desarrolla con un grupo de pacientes psiquiátricos, en pos de convertir el arte en un medio de transformación de la sociedad. Además, no solo es una excelente creadora plástica, sino que ha incursionado en diferentes modalidades estéticas de la palabra, pues sus poesías también han sido publicadas en varias ocasiones.
Según la crítica especializada, sus trabajos son portadores de un espíritu híbrido que surge de los llamados talismanes, tan recurrentes en su poética. En palabras de la propia autora: «cuando creo un talismán debo estar en un ánimo especial, que refleje mi fe y mi superstición, porque yo lo lleno de fuerza, contenido y energía». Para ello se basa en un lenguaje de códigos visuales formados por la X y la serpiente. La X representa la negación, mientras la serpiente es un símbolo de cambio o de «revisión interna». A través del vocabulario de signos alude a una cosmogonía íntima, familiar con la que se propone exteriorizar lo que ve, escucha, sufre, siente y vive a diario en esta sociedad atravesada por las crecientes adversidades que aquejan al sujeto contemporáneo.
INSURGENCIA ARTÍSTICA/ PERSONAJES DE ALMAS INDOMABLES
INSURGENCIA ARTÍSTICA/ PERSONAJES DE ALMAS INDOMABLES
"el lenguaje es violencia, hasta el lenguaje que trata de ser más refinado, sutil, puede ser violento y puede ser tan diferente a la realidad; ese lenguaje y esa poesía tan ajena que es violenta porque es diferente y su propia presencia es violenta. Un intelectual que se siente distanciado del mundo y espectador del mundo puede ser lo más violento, lo más voyeurista y lo más asqueroso que hay sobre la tierra".
Con un discurso poderosamente insurgente nos trae una pintura que nace de lo salvaje, que de por sí es salvaje y que incita a tal efecto. Por ejemplo, su serie de reinas son una suerte de personajes con quienes la artista establece una empatía casi sobrenatural en donde se pone de manifiesto lo especular de la obra con la artista. El trazo se vuelve vertiginoso y la obra se da dentro de un expresionismo delirante. Haddad nos trae los pedazos de un mundo representados por sus propios personajes con la fuerza y crudeza del mundo de hoy.
"Difícil nombrar lo salvaje porque lo salvaje no tiene lenguaje, no se expresa de ninguna manera, no se transforma, no transmuta en el lenguaje, lo salvaje se queda en lo físico, en la tierra, en la ceniza y las cenizas en los huesos y los huesos en las cenizas" dice la artista.
Su visión, muy fragmentaria por demás, se expande en tres direcciones que apuntan al pasado, presente y futuro. De este modo Blanca se conecta con una suerte de entramado donde está presente lo atávico así como todo lo relacionado con un mundo por venir escalofriante y del que ella misma especula en su condición de vidente.
"Cuando pongo el pasado, el presente y el futuro juntos veo una explosión, luego veo una oscuridad tenebrosa y fría, siento frío y veo una luz incandescente, una luz blanca que desaparece. Esa es mi percepción del tiempo, el Big-bang y luego la fuerza de una gran explosión, veo un tiempo suspendido y luego veo una implosión, algo que se absorbe, que se dirige hacia adentro… Bueno, creo que no tiene explicación por qué estamos aquí, yo creo que el arte bello es por eso, por esa espontaneidad, por esa falta de explicaciones que también tiene, una falta de sentido que también relaja, que también le da al ser humano una conciencia total... Es que el tiempo no está para que tú lo entiendas, uno no lo puede entender porque para entender al tiempo tendrías que tener una memoria de tus primeras vidas, de tus antepasados. Tú tienes buena memoria pero ahorita estás demasiado ocupado porque los tiempos modernos son demasiado rápidos y no tienes tiempo para darte cuenta de lo que significa el tiempo… Pero el tiempo es tan amplio que no lo puedes ni nombrar porque pasarías toda la vida nombrándolo. Yo creo que la mejor manera de percibir el tiempo es en silencio, los momentos de silencio, cuando realmente sientes que el tiempo presente se detiene y se detiene la presión o la velocidad. Cuando se acaba la bulla del presente yo pienso percibir el pasado y el futuro".
XI BIENAL DE LA HABANA. CUBA 2012
"El trabajo de Blanca Haddad es denso, intenso, intimidante. En esta artista interesa especialmente su forma de recoger el universo de imágenes que brotan del ejercicio y los abusos del poder dentro de la tensión femenino-masculino”. MariaLuz cardenas, Curadora.
"Su pintura no se ofrece fácilmente. Se resiste, nos hiere. Ella irradia una fuerza poderosa que nos intimida. Conocer a la artista es esencial. A través de sus palabras, las pinturas se van liberando gradualmente de su velo de angustia hasta adquirir un significado profundo. La dulzura y sensibilidad de la artista están presentes en ellas por una razón. Un retrato de Blanca Haddad, una de las pinturas mas representativas de su generación en la nueva pintura Latino Americana. La violencia de su obra nos toma por la garganta, como si la artista hubiese sido tomada por una fuerza irreprimible que la forzó a transferir su furia sobre el lienzo…” Perrine Delangle. Blanca Haddad, entre lo ingenuo y lo sangriento.
1 comentarios:
Muchas gracias! muy agradecida por tus palabras.B
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